martes, 3 de enero de 2012

Overcome

Y es entonces cuando ocurre, cuando asumes de verdad que se ha acabado, que el único camino que queda ahora es hacia delante. Y en realidad es todo lo que quieres hacer, seguir adelante, continuar, avanzar. Crear tu camino.
Y te das cuenta de todo el tiempo que estuviste esperando algo que no volverá, porque ya ha seguido su propio camino, tan distinto y alejado del tuyo.
Y duele, por supuesto que duele. Duele ver como una parte de ti se va, y aceptar que, aunque decida volver, nunca será lo mismo.
Y es entonces cuando, al fin, eres capaz de llorar. Cuando la esperanza deja de retener todos esos sentimientos que ahora resbalan por tus mejillas sin que puedas ni quieras hacer nada para evitarlo. Porque sabes que es lo que necesitabas, llegar al fondo, para poder impulsarte con más fuerza. Sabes que después de esto, serás más fuerte, más grande, más tú.
Porque es lo que quieres, y lo que lucharás por conseguir. Dejar atrás todo ese pasado que te frena cada vez que intentas caminar. Superarlo, por fin, porque ya no queda nada de lo aquello por lo que lloraste. Porque los dramas y los motivos ya dan igual, y por una vez, lo único que importa eres tú.
Aunque claro, nadie va a ser capaz de borrar tus recuerdos.
~Triss

3 comentarios:

  1. Hay que aprender a convivir con el recuerdo...

    ResponderEliminar
  2. En parte me siento identificada, la verdad.
    Los recuerdos raramente se borran, la mente los elije, aunque claro con el paso a veces se logran esfumar, y queda una baga idea de lo que fue, o polvo de lo que ya no es.
    Un beso grande, y a seguir adelante =)

    ResponderEliminar