Junkie

Él es como un chute de la droga más fuerte que te puedas imaginar. Las primeras veces, el subidón es increíble, no quiere que se acabe nunca esa sensación, y te mueres por repetir. Pero después, llega un momento en que abres los ojos, y te das cuenta de que esto te está haciendo daño, de que no compensa el subidón por la bajada que le sigue. Y entonces intentas salir, dejarlo y alejarte. Y puede que hasta creas que lo has conseguido, que pasen los meses y te creas inmune a sus efectos. Crees que vuelves a controlar la situación, que ya no va a afectarte. Por supuesto, te equivocas. Siempre vuelves a caer. Incluso cuando tu sentido común te está diciendo a gritos que no, que huyas, que escapes de eso, vuelves a caer, igual que al principio.
Y aquí estoy yo, creyendo sus palabras como una niña tonta, aunque en el fondo sé lo que buscan, y lo que no estoy dispuesta a entregar. Aunque sé que es imposible que esto salga bien, porque nunca ha salido bien. Que no es más que un juego, el cual quiere ganar. Pero yo ya no soy la niña inocente que hace tiempo se enganchó a sus palabras. He cambiado, aunque no lo vea, y no volveré a cometer el error de quererlo más que a mí. Aún así, soy una estúpida yonki de su cariño, por lo que voy a seguir en su juego, pero añadiré una regla más. El primero en enamorarse, será quien pierda. Y ten mucho cuidado, porque yo odio perder.
~Triss

Connected

Tienes mil manías que me desesperan, quinientos cambios de personalidad que me pierden, doscientos comentarios que me hacen odiarte y un ego del que mi sentido común me aconseja apartarme. Eres borde, bipolar, exasperante y extraño. Eres un perfecto imbécil que me ha hecho daño una y otra vez, pero tus manos encuentran el punto exacto en mi cintura que me hace temblar, sin necesidad de que nadie se lo haya enseñado antes. tus palabras tienen la capacidad de hacerme caminar entre las estrellas, para un segundo después dejarme caer al abismo.
Eres un peligro potencial, alguien de quien no debo fiarme. Eres capaz de hundirme una vez, y otra, y otra más sin que te importe lo más mínimo. Eres esa clase de persona de la que cualquiera se alejaría, pero, sin embargo, yo sigo inexplicablemente conectada de alguna forma.

~Triss

I only want you to come back

¿En serio no eres consciente de cuánto daño me haces? ¿De que cada llamada me hunde un poco más? ¿De que cada silencio me aplasta contra tu ausencia? ¿No te das cuenta de que, aunque no quieras, me importas, de que te echo de menos?
Pero no, tú no te das cuenta, porque dices que quieres estar en el presente, pero sigues rumiando recuerdos del pasado. Porque sigues tan encerrado en tu dolor y en tu desgracia que no te das cuenta de la devastación que vas dejando a tu paso. No te das cuenta de que los demás también somos personas, también nos duele el silencio, nos mata la ausencia de quien queremos. No te das cuenta de que no eres el único que se pasa las noches enteras llorando, que desearía volver al pasado, aunque solo fuese un instante, y que todo volviera a ser fácil. No te quieres dar cuenta de que daría cualquier cosa por recuperar las noches en las que se hablaba de cualquier idiotez porque no podíamos dormir. De que no eres el único que se ahoga entre recuerdos, de que mis pensamientos tampoco me dejan respirar. No te das cuenta de que me da igual el pasado, me dan igual los cuatro meses de fría hostilidad y cruda indiferencia que me has regalado y que no creo merecer. De que no quiero que me pidas perdón, no quiero que reconozcas nada, no quiero que me digas nada. Sólo quiero que vuelvas, que no me cuelgues dos segundos después de llamar. Sólo quiero poder volver a contarte todas las gilipolleces que tengo en la cabeza. Volver a sentir que cuando mi mundo se desmorone, habrá alguien que me dirá que puedo con esto. Que soy capaz de volver a construirlo todo. Sólo quiero que vuelva mi amigo.

~Triss

A tu juego yo también juego.

Volvemos al principio. Volvemos a las conversaciones que no quería que acabasen, a las palabras que me encantaba escuchar. A lo mismo de siempre, cuando tú quieres, como tú quieres. Pero esta vez no te has dado cuenta de que he cambiado. Ahora me sé las normas. Perder tantas veces me ha enseñado a jugar, y pronto descubrirás que lo hago mejor que tú. Porque ya no estoy dispuesta a perder otra vez, aunque el premio, si es que puede llamarse así, hace bastante que dejo de parecerme atractivo.
Pero tú sigues insistiendo, al parecer quieres jugar. Está bien, juguemos. Pero antes de empezar, te daré un consejo: ten mucho cuidado con cuanto de ti pones encima del tablero, y como de altas haces las apuestas, porque esta vez, tengo muy claro como voy a jugar mis cartas, y más aún que vas a devolverme todo lo que te entregué.

~Triss

Ella. Siempre.

Ella es la persona más increíble que he conocido en mi vida. La que más me apoya. Con la que más horas he pasado al teléfono. En quien más confío. Ella es quien más me hace reír. La que aguanta mis malos humores sin una queja. Es quien me demuestra su confianza, aunque a veces se olvide de que hay un teléfono que nunca se va a apagar. Es la persona por la que haría cualquier cosa.  Por quien pondría la mano en el fuego, y entraría directamente en la hoguera si fuese necesario. Ella es la persona con la que he compartido los mejores momentos y las peores peleas. La que me amenaza con hacerme fotos mientras duermo. Con quien he aprendido a perdonar, a equivocarme, a rectificar. Ella es la que me ha ayudado a madurar, a ser mejor persona. Es para quien estaré ahí siempre, pase lo que pase. Quien me ha apoyado en mis peores decisiones. Ella es más que una amiga. Es una mascota, una hermana, un esposa, una prima, una confidente. Ella es la persona que nunca cambiaría. Ella, a la que nunca me cansaré de repetir que tiene un hueco donde sea que yo vaya. Ella es una parte de mi. Alguien sin quien no puedo vivir. Ella es única, irrepetible, irremplazable. Ella es la amiga por la que todos deberíais envidiarme. Porque ella es mi mejor amiga.

~Triss

Ya lo deberías saber...

Que si quieres ayuda, sólo tienes que llamar. Que da igual todo el daño que hayas hecho antes, que siempre sabré perdonar. Que siempre, significa siempre. Que da igual que esté a 200 kilómetros, siempre estaré ahí para ti. Que me importas, por mucho que me repita que no. Que te quiero, y sé que no estás bien. Que mis prioridades están tan bien ordenadas como siempre estuvieron. Que no van a cambiar. Que estás antes de cualquier cosa. Que puedo con esto. Que podemos con esto. Que no estás solo. Que odio comunicarme contigo de esta forma, pero sigo confiando en que a veces me leas. Que estoy aquí, y aquí voy a seguir. Que sólo tienes que llamar.
~Triss